A quién le importa



Para el nuevo reto del tintero


De nuevo, en la insoportable reunión mensual, es intolerable que sea a mediados de mes, el cobro de la nómina forma parte del pasado y la próxima queda en un futuro lejano, es imposible relativizar.

Mientras el de recursos humanos comenta la nueva idea que se les ha ocurrido para fomentar nuestros valores, el CEO bosteza, los creativos interrumpen y el financiero pregunta dónde está la rentabilidad de cada sugerencia,  suena mi teléfono.

«A quién le importa lo que yo haga, a quién le importa lo que yo diga»

—Carmencita, que sea la última vez que entras a la reunión sin apagar el teléfono, la horterada de tu canción interrumpe el fluir de ideas—escupe mi jefa.

Pero algo, arde en mi interior, lejos de apagar el teléfono, me voy al Spoty y …

«La gente me señala, me apunta con el dedo»

—¡Carmencita!,  Supongo que eres capaz de apagar un móvil.

Me levanto, subo el volumen y me acorto la falda para salir al ritmo de la canción

—¡Pero Carmen, te has vuelto loca!

Recojo mis cosas ante la perplejidad de mis compañeros y cuando diviso a la pareja de guapos de la oficina, me acerco con paso decidido.

—Llámame—le digo a Alex

—O tú—le sonrío a Carla

—O los dos

Pico el ascensor ante la estupefacción general y vuelve a sonar ese estribillo

Abro los ojos y Fangoria suena como cada mañana para decirme que son las siete, parpadeo mientras pienso si será mejor cambiar de alarma.


Comentarios

  1. Hola, Lulita. Pues eso... ¿A quién le importa lo que yo haga? Es triste que las habladurías sean el hobby nacional pero bueno, mejor levantar la cabeza y tirar pa'lante sin importarte el veneno de las malas lenguas.
    Un abrazo enorme y gracias por participar.

    ResponderEliminar
  2. Supongo es una tonada muy alegre. No deberia cambiarse.

    ResponderEliminar
  3. Genial, Lulita. Una historia muy divertida con un giro final que cambia el sentido en el último momento. El mensaje de la canción, estupendo.

    ResponderEliminar
  4. Esta canción de Alaska es una de mis favoritas. Buena aportación. Saludos!
    lady_p

    ResponderEliminar
  5. Hola Lulita me ha encantado tu historia y la canción también tiene lo suyo. Buen finde. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  6. Ole por Carmencita! A ver si el próximo día que vaya a la oficina se atreve a dejarlos a todos pasmados al ritmo de su canción! Genial! Un abrazote amiga!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Todos nos sentimos Carmen alguna vez jaja. Un abrazo amiga!

      Eliminar
  7. Hola Lulita, una historia que me recordó con gracia la canción... A quién le importa lo que yo haga... El giro final un acierto. Muy buena alarma. Un abrazo

    ResponderEliminar
  8. A más de uno o una, le habrán dado ganas de hacer lo mismo que Carmencita. Pero, claro, dejar el curro así, por las buenas, solo se puede hacer si te ha tocado la lotería. Muy divertido.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Toda la razón M Cristina, al menos nos quedan los sueños. Gracias por leerlo. Un saludo

      Eliminar
  9. La canción está genial y tu protagonista también, lo malo es que todo fue un sueño y claro de ahí a la realidad hay un gran trecho.
    Bien contado
    Un saludo Lulita
    Puri

    ResponderEliminar
  10. Hola Lulita, jajaja muy divertido tu relato, me imagino la escena en la oficina entre la seriedad de los circunspectos empleados y es todo un espectáculo. El momento de dar el teléfono al guapo y a la guapa, ¡que más da ya todo! ha sido el punto álgido. Lástima que solo haya sido un sueño, la libertad de mandarlo todo a la mierda es algo que todos deberíamos tener al menos una vez en la vida. Quien sabe, tal vez en este nuevo día vaya la vencida. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Totalmente de acuerdo contigo! Al menos una vez en la vida. Gracias por pasarte, un abrazo!

      Eliminar
  11. Jajajajaja, gran tema el que escogiste, Lulita!! Muy buen micro, lleno de rebeldía y de humor. Me dio pena que fuera tan solo un sueño jajajaja. Le aconsejaría a la protagonista que no cambie de canción. ¿Quién sabe si un día su sueño se hará realidad? Un gusto leerte, un abrazo!!

    ResponderEliminar
  12. Hola, Lulita, si que me he disfrutado tu micro.
    Si Carmencita tiene sueños tan atrevidos, es seguro que muy pronto consigue salirse de la matrix, ja, ja. Si todas las mañanas se despierta con ese mantra sagrado de , no me caben dudas de que consiga todo lo que desea en la vida, la libertad es su lema, de ahí a la felicidad solo hay un pequeño trecho.
    Muy bueno, un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por leerlo y por tus palabras. Un abrazo!

      Eliminar
  13. No cambies de alarma, cumple ese sueño y cambia de trabajo. Me ha encantado.

    Me resulta difícil integrar los diálogos, así que admiro a quienes lo hacéis con tanto acierto.

    Un abrazo.

    P.D: al inicio me he sentido tan identificada con mi situación laboral que he pensado que estabas contando mi vida ^^

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Rebeca, creo que más de uno nos sentimos Carmen. Un abrazo!

      Eliminar
  14. No sé si es buena idea eso de poner canciones que nos gustan en los despertadores, yo lo hice y ahora cuando las oido me revuelven las tripas, jajaj.
    Muy bueno, Lupita, un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si el despertador es para trabajar, es normal que acabe asi jaja. Gracias Pepe por pasarte. Un abrazo!

      Eliminar

Publicar un comentario

de lectura obligada

Verde oliva

La Luna abrazando al Sol